La sabiduría de los líquenes 1 Se oye la llave accionando la cerradura, saluda sin mucho empeño lanzando un hola al aire, tira el abrigo en el respaldo del sillón y se derrumba en él. Ella le mira preocupada. ‒‒¿Qué te pasa? —Estoy fatal, hoy definitivamente se ha roto todo. —¿Qué ha pasado? —El grupo se ha ido a la mierda. —¿Y eso? —Ya llevábamos tiempo mal y hoy ha explotado. Esto es como una relación de pareja, pero con cinco personas, cada una con su enorme ego. —Llevo tiempo notándote raro, apagado. —Claro porque me lo estaba viendo venir y llevo tiempo que no estoy bien, voy a arrastras, sin energías. —Ya, ya. ¿Y si nos vamos al pueblo? —¿Al pueblo? ¿A qué? —Ya sabes que llevo tiempo queriendo ir, además nos servirá para desconectar, mejor dicho para reconectar. —El pueblo, qué aburrimiento. —Descuida que estaremos entretenidos, tengo un plan. 2 Se levanta temprano, ha dormido como el culo, maldito colchón y no sabe qué hacer en esa casa. Ni siquiera entiende la cafetera. E...
Cuatro (o cinco) luces . Cuando sube el café. Cuando fluye la tinta y se transforma en caudal. Cuando vos reís. Cuando, de repente, me sueltas: "Eres el mejor papá del mundo" Cuando somos más y soy menos. ... y algunas sombras. Cuando se instala el rencor entre tus cejas y ya no sonríes, nunca . Cuando n unca está tan, tan lejos. Cuando las palabras son pájaros que no saben volar. " Cuando al punto final de los finales n o le siguen dos puntos suspensivos . "* Cuando me muero de miedo . *Puntos Suspensivos. Joaquín Sabina .