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Mostrando entradas de junio, 2021

La tiranía de la felicidad obligatoria: ¿Por qué nos cuesta tanto admitir que estamos mal?

Has dormido fatal, te plantas las gafas de sol y sales a la calle como un zombi, sin pensarlo demasiado. Hay que trabajar. Te saludan, “hola, ¿qué tal estas?” “Bien” respondes y sigues con lo tuyo. ¿Por qué no decir la verdad? Porque no decir que has pasado una noche de mierda, que te duele todo el cuerpo y que no sabes como vas a terminar el día. Nos cuesta tanto ser sinceros, mostrar nuestras debilidades, sufrimos una especie de imposición social a través de la cual, parece que siempre hay que estar bien y que no se nos permite estar mal. Siempre tenemos que estar alegres y sonrientes o al menos aparentarlo, en las redes sociales todo esto se amplifica, salvo honrosas excepciones, Instagram es un catálogo de felicidad vacía, de falso éxito, de pavos reales desplegando todos sus encantos. Se me ocurre que en estos tiempos en lo que todo se compra y se vende, más que comunicarnos, muchas veces, nos vendemos.  Dicen que los amigos son aquellos que te preguntan “¿qué tal estás?” y es...

Aquellas noches

Tengo la sensación de que siempre he andado trasteando con esto de los blogs . En el anterior publiqué esta pequeña historia, allá por el 2013, que me da muy buen rollo y me ha dado por rescatarla aquí. Sólo corrijo alguna coma y algunas erratas, aunque ahora cambiaría bastantes cosas. Imagen de autoría desconocida. Al fin llegó la tarde del viernes, la vida estaba fuera de aquel instituto, que parecía encerrado en si mismo. Estaba fuera y estaba muy viva. Solo había que esperar a que cayese la noche o cayese el sol según se mire. El ritual era recurrente, comenzaba en el suburbano. Por los intestinos de la ciudad Tomás podía observar un catálogo de seres variopintos, la mayoría se desplazaban con el mismo propósito pero con distinta estética, distinta actitud. Le encantaba este momento, a cada grupito o a los que como él iban solos les asignaba una zona de marcha. Estas niñas tan bien vestiditas y tan tontitas a Bilbao, estas otras también muy arregladitas pero con un toque alternati...